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Tos ferina en niños

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Tos ferina en niños

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Dormir al bebé

A pesar de los años de vacunación generalizada, la tos ferina es una enfermedad que sigue presente en los niños de nuestro país. Recientemente se ha producido incluso un alarmante aumento de su incidencia. Este artículo para padres presenta el cuadro clínico de la tos ferina haciendo especial hincapié en las posibles complicaciones y los principios de prevención.

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Curso clínico típico de la tos ferina

La tos ferina es una enfermedad que dura muchas semanas. El curso de la enfermedad puede variar desde un curso grave, complicado con neumonía e inconsciencia (que afecta principalmente a los niños no vacunados), hasta un curso denominado abortivo, que se da en niños que han recibido previamente al menos una inmunización parcial y en adultos.

Típicamente, se distinguen 3 periodos de enfermedad:

  • I - periodo no infeccioso: dura 1-2 semanas, se manifiesta de forma atípica, similar a las infecciones respiratorias triviales. Hay cuadros subfebriles, rinorrea y faringitis, tos. Nota: Durante este periodo, el niño es más contagioso para otros niños.
  • II - Periodo de tos paroxística: dura hasta 4-6 semanas. Durante este periodo, aparecen ataques de tos persistente, típicos de la tos ferina, lo que facilita el diagnóstico. La tos en el segundo periodo de la tosferina es una tos paroxística, que se produce principalmente por la noche. El niño que empieza a toser en algún momento - es incapaz de parar. Hace una serie de una docena o más de toses cortas y secas. Entre tos y tos, él o ella lucha por coger aire - acompañado de un sonido sibilante comparable al canto de un gallo (tosferina, resoplido). Los ataques de tos ferina provocan miedo y disnea en el niño. A menudo, al toser, el niño vomita y aparecen petequias en la cara. Durante este periodo pueden producirse complicaciones graves, como se describe a continuación. Los bebés corren un riesgo especial.
  • III - periodo de recuperación. Después de semanas de tos paroxística, los síntomas se alivian gradualmente, pero sigue habiendo al menos seis semanas de hiperreactividad de las vías respiratorias, lo que provoca recidivas de la tos cuando se expone a diversos estímulos inespecíficos como el humo del tabaco, el aire frío o el esfuerzo físico.


foto: panthermedia

Complicaciones de la tos ferina

La tos ferina es una enfermedad con un riesgo relativamente alto de complicaciones. El riesgo más grave son los ataques violentos de tos del lactante, que pueden provocar la obstrucción de las vías respiratorias y, en casos extremos, incluso apnea y parada cardiaca. Entre otras complicaciones, cabe mencionar dos de las más importantes:

  • Neumonía con formación de abscesos o dilatación: las sobreinfecciones estafilocócicas que conducen a una neumonía grave son frecuentes en el curso de la tos ferina.
  • Encefalopatía (encefalitis por tos ferina ) - la toxina de la tos ferina tiene un efecto perjudicial sobre el sistema nervioso central. Además, los síntomas neurológicos se ven favorecidos por la hipoxia, que se produce durante un periodo de tos paroxística persistente. Los síntomas incluyen alteraciones de la conciencia, convulsiones, aumento de los reflejos tendinosos, etc. Se trata de una afección muy grave con una tasa de mortalidad de hasta el 20-30%.