Los tom ates también tienen un efecto beneficioso sobre nuestra salud y belleza, por lo que ahora que la temporada de tomates está en pleno apogeo, es una buena idea echar mano de ellos.

Aunque hoy resulta difícil imaginar nuestros menús sin ellos, al principio se pensaba que no eran comestibles. Los tomates llegaron a Europa desde Sudamérica en el siglo XV gracias a Cristóbal Colón. Rápidamente se establecieron en jardines y hogares como ... plantas ornamentales.

Tardaron mucho tiempo en abrirse camino en las cocinas europeas. Los italianos fueron los primeros en sentirse atraídos por el tomate y lo llamaron pomodoro, o manzana dorada. Se hicieron tan populares que se convirtieron en la base de la mayoría de los platos italianos.

Licopeno: la fuerza del color

Los tomates contienentantas vitaminas y minerales que asegurando su presencia constante en la dieta diaria, marcamos una verdadera diferencia en nuestra salud. El color de los tomates se debe al licopeno, un pigmento que posee valiosas propiedades para la salud.

En primer lugar, tiene un efecto anticancerígeno y protege contra el cáncer de próstata, entre otros. También previene los infartos de miocardio y la aterosclerosis.

Gracias a las vitaminas C y E, los tomates tienen un efecto beneficioso sobre el cutis, ya que refuerzan los vasos sanguíneos y retrasan el proceso de envejecimiento de la piel. Como contienen vitamina A, que tiene un efecto beneficioso sobre los nervios ópticos, son un buen apoyo para las personas que trabajan a diario frente al monitor de un ordenador.

El potasio también es importante, ya que neutraliza el perjudicial exceso de sal de nuestra dieta y reduce la tensión arterial, así como el ácido fólico, muy importante para las mujeres embarazadas.