El alcohol está definitivamente prohibido durante el embarazo: se recomienda la abstinencia a las mujeres embarazadas porque el consumo de alcohol pone al bebé en riesgo de padecer el síndrome alcohólico fetal. Existen numerosos problemas asociados a este síndrome, por lo que los científicos siguen investigando si los efectos tóxicos del alcohol sobre el feto pueden reducirse de algún modo. Un estudio reciente demuestra que las consecuencias del consumo materno de alcohol pueden reducirse teóricamente... medicamentos conocidos y disponibles desde hace tiempo.
Publicidad: