No hay nada mejor que una fiesta de karaoke. No sólo es una forma estupenda de pasar el tiempo libre, sino también una oportunidad para demostrar su personalidad como cantante. Para los principiantes, es un gran antiestrés.
Es un evento en el que los niveles de adrenalina pueden subir. El estrés aparece justo antes de salir ante el público de un pub o un café local y cantar unos minutos una canción.