El primer intento documentado de utilizar tejido del propio paciente para corregir un defecto estético se llevó a cabo ya en 1893, cuando Franz Neuber, un médico alemán, realizó un procedimiento para trasplantar un trozo de tejido graso tomado del brazo del paciente a su cara, concretamente a una zona distorsionada por una osteítis tuberculosa.
Informes recientes
En los últimos años, se ha demostrado que en la piel humana existen células madre con un potencial muy elevado. En esta ocasión merece la pena señalar los tipos de células madre:
- TOTIPOTEHTANE - que tienen el potencial de diferenciarse en cualquier tipo de célula, incluida la placenta
- PLURIPOTEHTANE - que tienen el potencial de diferenciarse en cualquier tipo de célula, excepto la placenta
- MULTIPOTEHTANE - con potencial para diferenciarse en varios tipos celulares diferentes
- AURPOTETANO - con potencial para diferenciarse en un único tipo celular
Desde el punto de vista de la medicina regenerativa, lo más interesante sería obtener células PLURIPOTEHTANE (son las menos diferenciadas). Hasta ahora, sin embargo, sólo se han podido conseguir a partir de TROFLAIEATS (embriones en un estadio bajo de desarrollo), es decir, el método para obtenerlas podría ser el CLONING. Con ello, como es bien sabido, surgen numerosas preocupaciones éticas y morales.
En los últimos años se han descrito las llamadas IPS (células madre PLURIPOTEHTA inducidas), que se obtienen tras la estimulación con estímulos especiales de células madre derivadas de la piel. Actualmente se encuentran en fase de investigación. A partir de células de la piel, los científicos han logrado crear/replicar las estructuras de prácticamente todos los órganos.
Actualmente se están proponiendo tratamientos estéticos en los que se inyectan células madre además de fibroblastos (por ejemplo, Methode Cellesthic). Estos tratamientos son mucho más eficaces. Esto se debe a que las células madre tienen una capacidad mucho mayor para proliferar, inducir a los tejidos circundantes y mostrar efectos inmunomoduladores. Además, el uso de células madre adecuadamente poco diferenciadas ofrece la posibilidad de repoblar una gran variedad de células, no sólo fibroblastos.
También se está intentando utilizar células madre de la piel para tratar otras afecciones relacionadas con la edad: enfermedades cardiovasculares, articulares, diabetes, etc. Actualmente se están llevando a cabo estudios en los que las células madre cultivadas a partir de la piel del paciente se administran a éste por vía intravenosa y se introducen en el órgano a tratar, por ejemplo, el parto. Sus resultados son muy prometedores.
Sin duda, las actividades iniciadas por los médicos estéticos encontrarán aplicación en toda la medicina en el futuro.
foto: pantherstock
El trasplante de células del propio organismo y el Premio Nobel de este año a Elizabeth H. Blackburn, Carol W. Greider y Jack W. Szostak.
Un organismo sólo es tan viejo como sus células madre. Partiendo de esta premisa, respaldada, entre otras cosas, por las investigaciones de los galardonados con el Premio Nobel de Investigación de este año, que describieron la importancia de los telómeros y la telomerasa en el proceso de envejecimiento celular, los tratamientos de medicina estética de trasplantes de fibroblastos y/o células madre del propio organismo estarán estrechamente ligados a los biobancos en el futuro.
¿Qué significa esto? Significa que, tras un procedimiento de trasplante, se puede congelar un número suficiente de células hasta varias décadas para reutilizarlas en procedimientos posteriores. Es decir, los fibroblastos extraídos de, por ejemplo, un paciente de 35 años pueden inyectarse en ese mismo paciente incluso décadas después. Se trata del primer paso hacia un verdadero rejuvenecimiento de la piel.
"La investigación ganadora del Premio Nobel se ha convertido en la base del conocimiento sobre el envejecimiento celular. Gracias a estos conocimientos, sabemos que lo mejor será obtener células para la medicina regenerativa de pacientes lo más jóvenes posible". - afirma el Dr. Paweł Surowiak, de la Escuela de Postgrado de Medicina Estética PTL - "Además, la posibilidad de determinar la "edad de las células", basándose precisamente en la longitud de los telómeros o en la actividad de la telomerasa, puede convertirse en un método de diagnóstico utilizado para evaluar la calidad del material obtenido para el cultivo y el trasplante."