El sistema inmunitario desempeña un papel clave en la protección del organismo frente a enfermedades, infecciones y factores externos. Para quienes luchan contra su debilitamiento -ya sea debido a enfermedades autoinmunes, estrés crónico o deficiencias nutricionales- una dieta bien equilibrada puede ser la base para mejorar su salud. Una dieta sana para las personas con problemas del sistema inmunitario no sólo aporta nutrientes esenciales, sino que también favorece la regeneración del organismo, reduce la inflamación y refuerza los mecanismos de defensa naturales. En este artículo analizaremos en qué consiste una dieta de este tipo, qué alimentos incluir y cuáles evitar, y cómo afecta el estilo de vida a la inmunidad.
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