La prevalencia de síntomas psiquiátricos entre los pacientes que acuden al neurólogo es alta, de hasta el 50%, lo que indica que pueden ser una manifestación de muchos trastornos neurológicos.

Un aspecto importante de la coexistencia de trastornos psiquiátricos y neurológicos es el impacto de los síntomas psicopatológicos en el tratamiento y el diagnóstico del paciente. La cooperación con el paciente en tales situaciones es difícil.

Trastornos de la conciencia

Los trastornos de la conciencia son uno de los trastornos psiquiátricos más comunes en la práctica médica, incluidos los trastornos neurológicos. Surgen como resultado de una deficiencia metabólica del cerebro. La deshidratación, la hipoxia, la fiebre, las neuroinfecciones, las lesiones cerebrales traumáticas y los derrames cerebrales suelen provocar esta afección.
Las manifestaciones típicas de los trastornos de la concienciao incluyen:

• desorientación
• trastornos del pensamiento y la memoria
• alucinaciones y delirios
• ansiedad;
• trastornos del sueño.

El manejo de los trastornos de la conciencia incluye la aplicación de un tratamiento causal y general, que es una parte importante de la terapia, especialmente en lo que se refiere a la hidratación, el establecimiento de unos niveles adecuados de electrolitos y glucosa, y el tratamiento de las infecciones concomitantes.

Trastornos depresivos

Los trastornos patológicos del estado de ánimo se dan en la mayoría de las enfermedades neurológicas, especialmente en las de curso crónico. En pacientes con esclerosis múltiple y enfermedad de Parkinson, la depresión se diagnostica en el 50% de los pacientes, mientras que en el curso de la epilepsia puede afectar hasta al 75% de los pacientes.
Además de un estado de ánimo decaído, se observa un aumento de la irritabilidad, vacilación emocional, apatía y retraimiento.

El tratamiento incluye terapia con antidepresivos.

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Trastornos de ansiedad

Los trastornos de ansiedad acompañan a los pacientes en las fases posteriores al ictus, la epilepsia, las lesiones cerebrales postraumáticas, la enfermedad de Parkinson y las enfermedades proliferativas del cerebro.

Trastornos de ansiedad tras un ictus

Los trastornos de ansiedad en pacientes post-ictus se observan en un 9-28%. La forma más frecuente de estos trastornos es la ansiedad generalizada o en forma de fobia simple. Los síntomas de ansiedad tras una apoplejía no tienden a remitir, lo que puede ser indicativo de una base "orgánica".