La sandía, conocida científicamente como *Citrullus lanatus*, es una de las frutas más refrescantes y populares asociadas con el verano, los picnics y los momentos de relax. Originaria de África, la sandía se cultiva desde hace miles de años y su pulpa jugosa y dulce y su característico color rojo o amarillo han conquistado los corazones de personas de todo el mundo. Aunque a menudo sólo se considera un sabroso tentempié, la sandía es un verdadero tesoro para la salud, ya que ofrece una amplia gama de beneficios, desde hidratar el cuerpo hasta apoyar el sistema cardiovascular y proteger contra el estrés oxidativo. Rica en agua, vitaminas, minerales y antioxidantes, la sandía es una forma natural y baja en calorías de mejorar su estado de ánimo y mantener un estilo de vida saludable. Disponible durante la temporada estival, y en forma congelada o deshidratada durante todo el año, es fácil de incorporar a su dieta diaria. En este artículo, analizamos en detalle por qué debe comer sandía y cómo afectan sus propiedades a su organismo. ¡Le invitamos a seguir leyendo!