El marisco -que incluye pescados, crustáceos y moluscos como gambas, almejas, ostras y salmón- ha sido una parte importante de la dieta en muchas culturas durante siglos, especialmente en las regiones costeras. Apreciado por su sabor único y su versatilidad en la cocina, el marisco no es sólo una delicia culinaria, sino también un auténtico tesoro de nutrientes. Ricos en proteínas, ácidos grasos omega-3, vitaminas y minerales, ofrecen una amplia gama de beneficios para la salud que favorecen tanto el cuerpo como la mente. Desde la mejora de la salud cardiaca y el refuerzo del sistema inmunitario hasta los beneficios para la piel y el cerebro, el consumo regular de marisco puede contribuir significativamente a mejorar el bienestar y la longevidad. En este artículo, analizamos en detalle por qué debería incluir el marisco en su dieta diaria y cómo afectan sus propiedades a su organismo. ¡Le invitamos a seguir leyendo!