Las anemias autoinmunes son una entidad patológica basada en un funcionamiento anormal del sistema inmunitario. Esta respuesta anormal implica la destrucción de las propias células del organismo como consecuencia del reconocimiento erróneo de un antígeno. Las anemias autoinmunes no son frecuentes, con una incidencia estimada de aproximadamente 1 a 3 casos/100.000 habitantes/año. Clínicamente, se manifiestan como ictericia, orina de color oscuro y síntomas típicos de hipoxia debidos a una reducción de los glóbulos rojos.