Las células cancerosas suelen ser notablemente diferentes de las células normales del organismo. Estas diferencias pueden estar relacionadas con su ritmo de división, su estructura, pero también con la producción de diversos tipos de sustancias. Este último fenómeno fue la base del trabajo de los científicos londinenses, que decidieron desarrollar una prueba de aliento no invasiva para diagnosticar los cánceres de esófago y gástrico. Según los científicos, el análisis de cinco sustancias presentes en el aire exhalado por los pacientes podría permitir el diagnóstico no invasivo del cáncer.