El tri ptófano desempeña un papel clave en la síntesis de serotonina, el neurotransmisor del que dependemos para sentirnos felices o no. Una deficiencia prolongada de triptófano provoca un estado de ánimo decaído y, a la larga, puede conducir al desarrollo de depresión y trastornos relacionados. Como nuestro organismo no tiene capacidad para sintetizarlo, es necesario suministrar triptófano al cuerpo con los alimentos.