La mujer moderna se esfuerza por tener un aspecto perfecto. Hoy en día, además de todos los tratamientos faciales y de todo el cuerpo, se ha popularizado la ginecología estética, también conocida como cosmetología.
En términos más sencillos, se trata de procedimientos para mejorar el aspecto de los órganos reproductores de la mujer.
Estos procedimientos incluyen:
- labioplastia: agrandamiento de los labios menores con ácido hialurónico o reducción de los labios menores,
- reducción o agrandamiento del pubis,
- plastia perineal (vaginoplastia), incluida la plastia de cicatrices tras la incisión del perineo,
- inyección del punto G con ácido hialurónico para mejorar la sensación sexual; - reconstrucción del himen,
- exposición del clítoris desde el pliegue cutáneo.
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Uno de los procedimientos más comunes es la labioplastia - reducción de los labios menores. La hipertrofia de los labios mayores se diagnostica cuando la anchura de los labios menores supera los 4 cm - se trata de hipertrofia de grado alto y de 2-3 cm - hipertrofia de grado medio. Las mujeres con labios demasiado grandes se sienten físicamente incómodas al realizar actividades cotidianas. Esto provoca abrasiones y daños en las sensibles partes íntimas, imposibilitando el coito, el ciclismo, etc. La intervención se realiza con anestesia local o intravenosa.
La labioplastia se realiza extirpando el tejido sobrante y volviendo a suturar el borde o extirpando el tejido desde la zona del clítoris hasta la zona posterior del espiráculo. Se utilizan suturas solubles.
Vaginoplastia: es un procedimiento habitual en las mujeres que han sufrido un estiramiento vaginal importante a causa del parto. El efecto negativo de esto es la falta de satisfacción con las relaciones sexuales.