Muchos padres no se dan cuenta de que la inflamación de la laringe en los niños puede ser peligrosa para su salud e incluso para su vida. Sucede que las infecciones más graves (víricas o fúngicas) en los niños requieren tratamiento hospitalario. Lo mismo ocurre cuando un niño sufre una inflamación repentina y muy grave de la laringe.
La hospitalización en algunos casos es necesaria porque protegerá al niño de la asfixia. La decisión de tratar al bebé en casa o en el hospital la toma el médico.