Al principio,el modelo de belleza eran las mujeres con "formas rubensianas", luego las Venus de Milo con caderas anchas y pechos pequeños, hasta la aparición de los llamados símbolos sexuales como Marilyn Monroe. En la actualidad, la imagen predominante de la mujer es la de una mujer muy delgada, incluso inmadura, perturbada en cuanto al desarrollo de los caracteres sexuales terciarios, por ejemplo, el vello corporal o el físico.

En una época tan reciente como los años 50, una modelo era un 8% más delgada que la mujer media; hoy en día, la cifra es ya del 20%. Todo ello se debe a la moda mundial, que tiene un enorme impacto en la percepción de la belleza femenina.

Siguiendo el ejemplo de las modelos que siguen unas normas dietéticas muy estrictas y a menudo padecen trastornos alimentarios, las jóvenes también han empezado a adelgazar en masa. El problema radica principalmente en que al seguir dietas equivocadas -sin supervisión de nutricionistas, con comidas incompletas, que provocan una pérdida de peso excesiva- la salud de la mujer que adelgaza puede verse afectada negativamente.

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LaOrganización Mundial de la Salud (OMS) ha hecho un llamamiento a los diseñadores de moda para que dejen de mostrar modelos antinaturalmente delgadas en las pasarelas, pero no todo el mundo está de acuerdo. El modelo moderno de belleza femenina se ha convertido en algo tan habitual que podemos verlo en todas partes: en los periódicos, en las películas, en los vídeos musicales e incluso en los anuncios de productos cotidianos.