Las enfermedades neurodegenerativas son cada vez más frecuentes en la población anciana. La gran mayoría de los pacientes se someten a estudios de imagen que muestran las estructuras cerebrales, pero cada vez se utilizan más los estudios funcionales, que incluyen el PET/TC. Con esta prueba es posible conocer la función (y la disfunción) del cerebro en el contexto del metabolismo de la glucosa, principal motor de las estructuras cerebrales. Por ello, la PET/TC se ha vuelto muy útil en el contexto del diagnóstico diferencial de las demencias.
PET en la enfermedad de Alzheimer
Laenfermedad de Alzheimer es la forma más común de demencia en los ancianos y afecta a alrededor de dos tercios de los pacientes con demencia de 60-70 años. Su prevalencia está relacionada con la edad: en personas de 60-64 años se encuentra en alrededor del 1% de las personas, frente al 20-40% de pacientes de 85 años. El diagnóstico se establece a partir de la evaluación clínica, así como de los resultados de las pruebas neuropsicológicas, que indican una pérdida cognitiva progresiva.
La tomografía por emisión de positrones puede ser un valioso marcador de la presencia de la enfermedad de Alzheimer, ya que muestra el daño neuronal. Cabe destacar que en algunas personas con Alzheimer, la enfermedad se desarrolla sobre un sustrato de deterioro cognitivo leve, que se hace evidente en la PET/TC, en forma de áreas asimétricas de metabolismo reducido de la glucosa que se combinan con el cuadro clínico. La exploración PET/TC muestra zonas de metabolismo reducido de la glucosa en las regiones temporal y parietal, así como en las regiones cingulada posterior y precingulada, una imagen un tanto típica, ya que este tipo de "patrón" de deterioro es frecuente en pacientes con un inicio temprano de la enfermedad, es decir, menores de 60 años.
El amiloide en los estudios
En las personas con enfermedad de Alzheimer, además de evaluar el metabolismo cerebral de la glucosa, se puede valorar la presencia de amiloide β (Aβ ) en el cerebro. El radiofármaco más utilizado para la evaluación del amiloide es el compuesto B de Pittsburgh (PiB) marcado con carbono 11C, que tiene una gran afinidad por los agregados de Aβ. La evaluación cuantitativa de la presencia de Aβ en el cerebro es extremadamente útil en el diagnóstico del Alzheimer, ya que su acumulación en el cerebro, representa la fase inicial de la enfermedad.
La demencia con cuerpos de Lewy (DCL) y la exploración PET/TC
LaDCL representa la segunda enfermedad demencial más frecuente entre la población anciana. Se caracteriza por la presencia de cuerpos de Lewy en el córtex, el subcórtex y el tronco encefálico. Además, la DCL pertenece a todo el espectro de enfermedades con cuerpos de Lewy, al igual que la enfermedad de Parkinson.
La PET/TC en pacientes con DCL muestra un consumo reducido de glucosa en ambos lóbulos parietales, los lóbulos temporales posteriores y la región cingulada posterior. Se trata de un patrón similar al hallado en la enfermedad de Alzheimer. En la DCL, el consumo de glucosa también se reduce en los lóbulos occipitales, típicamente preservados en el Alzheimer. Sin embargo, hay casos en los que el patrón de anomalías metabólicas es muy similar al encontrado en los enfermos de Alzheimer, en cuyo caso, una prueba para evaluar la actividad del sistema dopaminérgico ayuda a la diferenciación. La PET/TC con 18F-DOPA, un radiofármaco que se acumula en las terminales presinápticas de las neuronas dopaminérgicas, viene en ayuda de dicha evaluación. En el curso de la DCL, se observa una disminución de la acumulación de 18F-DOPA en la cabeza y la envoltura del núcleo caudado, y esta imagen también se observa en pacientes con enfermedad de Parkinson y demencia.
foto: panthermedia
Enfermedades neurodegenerativas raras
La degeneracióncorticobasal (DCB) se manifiesta típicamente por una distonía asimétrica y una sensación característica de miembro extraño (síndrome de la mano extraña). La PET/TC muestra una disminución asimétrica de la acumulación de radiofármacos en el córtex sensoriomotor con afectación de los núcleos subcorticales y el tálamo del mismo lado. Además, también se observa una reducción de la acumulación de 18F-FDG en la parte medial del córtex cingulado y una atrofia cortical asimétrica en las regiones frontal y parietal.
La atrofiacortical posterior (ACP), también está catalogada como una enfermedad neurodegenerativa poco frecuente. También está dominada por el deterioro visual y, se considera un tipo de Enfermedad de Alzheimer, donde los deterioros funcionales más comunes, incluyen el deterioro cognitivo con deterioro de la memoria y del lenguaje. En la ACP, el deterioro más común es la función visual cortical. El PET/CT muestra una disminución del metabolismo de la glucosa en la región temporoparietal y en el cíngulo posterior y la corteza visual. [1]