Las enfermedades neurodegenerativas son cada vez más frecuentes en la población anciana. La gran mayoría de los pacientes se someten a estudios de imagen que muestran las estructuras cerebrales, pero cada vez se utilizan más los estudios funcionales, que incluyen el PET/TC. Con esta prueba es posible conocer la función (y la disfunción) del cerebro en el contexto del metabolismo de la glucosa, principal motor de las estructuras cerebrales. Por ello, la PET/TC se ha vuelto muy útil en el contexto del diagnóstico diferencial de las demencias.
El diagnóstico de las demencias es un procedimiento extremadamente complejo y se basa principalmente en el diagnóstico diferencial. Las pruebas funcionales como el PET/TC son cada vez más importantes para este tipo de diagnóstico. Estos exámenes son extremadamente útiles ya que indican claramente las zonas de actividad cerebral durante el metabolismo de la glucosa, lo que significa que muestran la actividad de zonas específicas del cerebro, lo que a su vez es una información muy importante para que los especialistas determinen el tipo de enfermedad.
Enfermedades demenciales
Las observaciones indican que el número de enfermedades demenciales está aumentando entre la población anciana, lo que genera la necesidad de aplicar un diagnóstico lo más precoz posible. Un diagnóstico preciso es una muy buena oportunidad para que el paciente aplique un tratamiento y evite una degeneración estructural precoz.
Entre las principales causas de demencia en los ancianos, se encuentran principalmente dos afecciones: la enfermedad de Alzheimer (EA), responsable de alrededor del 65% de los casos, y la demencia con cuerpos de Lewy, responsable de otro 10-15%. Otras afecciones que conducen a la demencia son la demencia vascular por degeneración frontotemporal, así como otras afecciones menos comunes.
La gran mayoría de las personas con sospecha de demencia requieren un estudio de imagen como una resonancia magnética o un TAC. Se trata de exámenes estructurales para excluir patologías intracerebrales que puedan causar síntomas similares.
Otro tipo de pruebas son las funcionales, que evalúan el metabolismo de la glucosa en el cerebro. Se trata de pruebas como el PET/TAC, que se utilizan cuando existen dudas clínicas y facilitan el diagnóstico diferencial de las enfermedades demenciales.
foto: panthermedia
Examen PET/TC
Latomografía por emisión de positrones/tomografía computarizada (PET/CT) es una prueba basada en la tecnología avanzada de la medicina nuclear, que utiliza radiofármacos que emiten radiaciones β+.
La glucosa es el alimento básico de nuestro cerebro y, en consecuencia, el estudio en cuestión permite evaluar el consumo local de glucosa, que se convierte en un marcador de la actividad y la densidad sinápticas.
La prueba en sí es un procedimiento médico complejo y requiere condiciones especiales.
Antes de administrar el radiofármaco, debe determinarse la concentración de glucosa en sangre, que, si se realiza una exploración cerebral, debe ser inferior a 140 mg. El inicio del procedimiento médico es la administración intravenosa del radiofármaco a una dosis de 200-250 Mbq, tras lo cual el paciente debe permanecer despierto durante unos 30 minutos, es decir, con los ojos abiertos y en una habitación tranquila, silenciosa y ligeramente oscurecida para minimizar la activación cerebral.