Las células madre nos brindan la oportunidad de mostrar y comprender la complejidad de nuestro organismo. Pueden cultivarse en el laboratorio y su desarrollo y división pueden controlarse. El proceso de división de las células madre, los factores que lo afectan y la formación final de un tipo de célula especializada son muy complejos. Estas células construyen todo el organismo (desde la piel y los huesos hasta el cerebro, los pulmones, etc.), por lo que es necesario seguir investigando y observando.