Los colores presentes en un espacio vital influyen en las emociones, el estado de ánimo y los niveles de energía. Desde los colores de las paredes hasta los accesorios, los colores adecuados pueden favorecer la relajación, mejorar la concentración y apoyar la creatividad. Un interior dominado por un esquema cromático coherente no sólo puede influir en nuestro estado de ánimo, sino también favorecer la salud mental reduciendo el estrés y la tensión emocional. A continuación se muestra cómo afectan los distintos colores al estado de ánimo y cómo pueden utilizarse en el diseño de interiores para apoyar la salud mental.
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