El examen polisomnográfico es la prueba básica que permite registrar los cambios en las actividades fisiológicas del cuerpo humano durante el sueño. En manos de un especialista, es una herramienta indispensable para el diagnóstico de muchos trastornos del sueño (incluidos los ronquidos, la narcolepsia, el sonambulismo y otros). Se puede extraer mucha información del estudio, pero sólo la capacidad de interpretarla lógicamente permite sacar conclusiones importantes para la salud. ¿Cuáles son los parámetros de registro, los rangos de las variables y qué datos son importantes para el médico que interpreta el estudio?