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Alopecia androgenética: ¿cómo combatirla?

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Alopecia androgenética: ¿cómo combatirla?

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Hombres cuidándose el pelo, lavándose el pelo

La calvicie es un proceso de pérdida de cabello que puede variar en su curso y en su permanencia o reversibilidad. La calvicie reduce significativamente la calidad de vida, sobre todo de las mujeres, principalmente por razones estéticas. Entre los distintos tipos de alopecia, la más común es la calvicie de patrón masculino, es decir, la alopecia androgenética, que depende en gran medida de las hormonas. El tratamiento emprendido no siempre es eficaz, pero hay muchas formas de combatir esta afección.

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Tabla de contenidos:

  1. ¿Qué es la alopecia?
  2. Alopecia androgenética
  3. Hacer el diagnóstico
  4. Otros tipos de alopecia
  5. Estrés degradante
  6. ¿Cómo combatir la caída del cabello?
  7. Tratamientos en el salón de belleza

El cabello, hoy en día, desempeña sobre todo una función decorativa y de encanto, que al mismo tiempo se convierte repetidamente en un rasgo determinante del sentido de la belleza, especialmente en el caso de las mujeres. Por ello, no son insignificantes los problemas de trastornos del cuero cabelludo y del cabello que alteran su aspecto y provocan su caída o alopecia, considerada una molestia. Para abordar el problema, es importante saber que en los seres humanos los cabellos crecen a ritmos diferentes, es decir, tienen un ciclo capilar distinto, que consta de tres fases:

  • la fase de crecimiento del pelo
  • una fase de transición,
  • y una fase de reposo[1].

¿Qué es la alopecia?

La calvicie es el proceso de pérdida de cabello, que puede ser permanente o temporal, reversible. Dependiendo del alcance del problema, podemos hablar tanto de alopecia generalizada como de alopecia limitada a determinadas zonas o focos de distinto tamaño y localización. Los tipos más comunes de alopecia incluyen la alopecia androgenética (dependiente de andrógenos), la alopecia telogenética crónica, que está determinada multifactorialmente, y la alopecia areata.

Alopecia androgenética

Es la forma más común de alopecia y se da tanto en hombres (aproximadamente el 80%) como en mujeres (aproximadamente el 60%). El principal mecanismo implicado en este tipo de alopecia es la acción de los andrógenos sobre los folículos pilosos, lo que provoca su encogimiento y, por tanto, el adelgazamiento del cabello hasta que adquiere forma de mesquitas. Este problema es genético y depende del metabolismo de la testosterona. En las mujeres, el problema es algo menos frecuente, debido principalmente a las menores concentraciones de andrógenos en el organismo. No obstante, cabe señalar que, independientemente del sexo, las distintas zonas del cuerpo son sensibles a los andrógenos en distintos grados (la zona más problemática es la región frontal, mientras que los folículos pilosos de la región occipital y los folículos pilosos de las pestañas son los que menos responden a los andrógenos). [1]

La calvicie de patrónmasculino se diagnostica hasta en el 95% de los casos de alopecia, lo que explica la magnitud del problema. También es un problema psicológico muy importante, ya que provoca una reducción significativa de la calidad de vida de la persona que lucha contra esta afección. La etiología de esta afección está relacionada principalmente con la predisposición genética, la edad y el nivel de andrógenos en el organismo.

La alopecia androgenética se hereda de forma autosómica dominante, siendo la expresión genética variable o posiblemente poligénica. Los andrógenos, las hormonas responsables del desarrollo de la alopecia, determinan la aparición del vello en ciertas zonas (como la barbilla o el tronco) y la desaparición en otras zonas del cuerpo, ya que las diferentes zonas del cuerpo humano, tienen diferente sensibilidad a los andrógenos. [2]

Realización de un diagnóstico

Para que un médico pueda realizar un diagnóstico preciso, es esencial iniciar el proceso con una anamnesis y una exploración física detalladas y minuciosas. Además, la enfermedad tiene un cuadro clínico característico, que produce síntomas distintivos. Para confirmar el diagnóstico, es necesario averiguar si el inicio de la enfermedad se produjo después de la pubertad, si la alopecia es simétrica sobre la base de una retracción de las líneas temporales y craneales o si existe un adelgazamiento del cabello en la parte superior de la cabeza, si el cabello es más fino y corto, y si existe una predisposición genética en el paciente que pueda ser la causa de su enfermedad. La evaluación histopatológica muestra un número significativamente reducido de folículos pilosos y pelos terminales en favor de un mayor número de folículos mesiales y un número importante de hebras fibrosas. Los pacientes también pueden presentar una inflamación similar al liquen alrededor de los folículos pilosos como resultado de la respuesta del organismo al reconocer los folículos como anormales e intentar erradicarlos.

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El problema de la alopecia Foto: panthermedia

El tratamiento de la alopecia androgenética no siempre tiene el efecto deseado, pero ayuda significativamente a retrasar su desarrollo. También cabe destacar que en el tratamiento de la alopecia androgenética, la dieta es de gran importancia, en particular garantizar un aporte adecuado de proteínas y evitar los medicamentos que afectan negativamente al cabello (por ejemplo, los retinoides). [2]

Otros tipos de alopecia

La alopecia areata se caracteriza por la pérdida focal del cabello. Puede afectar a ambos sexos y a todas las edades, por lo que es una afección que afecta no sólo a los adultos, sino también a los niños. Se cree que el desarrollo de la alopecia areata está causado por un trasfondo autoinmune, y es frecuente en personas que ya padecen otra enfermedad autoinmune (como la NAC o el vitíligo). Sin embargo, al investigar la etiopatogenia de esta afección, los expertos no excluyen la posibilidad de que también tenga una base genética, y también llaman la atención sobre el papel del estrés en el desarrollo de esta enfermedad. El estrés es un factor que puede causar graves trastornos emocionales y también puede contribuir al desarrollo de la alopecia areata en personas genéticamente predispuestas, pero el papel del estrés en el desarrollo de esta enfermedad es actualmente poco claro y ambiguo.

Laalopecia telogenética es una forma de pérdida de cabello, la más común después de la calvicie de patrón masculino y la más frecuente en las mujeres. Se manifiesta como un adelgazamiento general del cabello en todo el cuero cabelludo. En casos aislados, puede limitarse a una zona determinada, pero esta forma es poco frecuente. Los síntomas, en forma de caída del cabello, aparecen tras un periodo de latencia, es decir, unos 3 ó 4 meses después del factor desencadenante. Por lo general, la caída del cabello se resuelve espontáneamente una vez que el irritante deja de actuar. La incidencia se sitúa entre los 30 y los 40 años, pero no se excluye la posibilidad de que la enfermedad aparezca a otras edades. Desde un punto de vista clínico, el desarrollo de la alopecia telogenética es multifactorial, pero los especialistas no han identificado estos factores de forma clara y fiable. Se supone que factores como el embarazo, las enfermedades febriles, las dietas drásticas, el hipotiroidismo y el estrés pueden ser las causas del desarrollo. Las fuentes para el desarrollo de esta afección también se observan en los medicamentos utilizados, por ejemplo, anticonceptivos, anticolesterol, anticoagulantes o fármacos psicotrópicos.

Otra forma de alopecia es la alopecia cicatricial, en la que el folículo piloso se degrada y se forma tejido cicatricial, lo que provoca la pérdida total del cabello. Suele tener una forma localizada y focalizada, pero puede adoptar una forma difusa y parecerse al tipo telógeno de alopecia. Las causas más comunes para el desarrollo de este tipo de alopecia incluyen el liquen plano, las infecciones bacterianas y fúngicas profundas, los traumatismos y la sífilis. Se trata, por tanto, de una afección que acompaña a otra enfermedad. Por lo tanto, es necesario diagnosticar la enfermedad primaria y administrar el tratamiento, mientras que el objetivo principal del tratamiento en la alopecia cicatricial es limitar su desarrollo y sus efectos. [1]

Estrés degradante

Además de las afecciones mencionadas, cabe mencionar el papel del estrés en la caída del cabello. El cuero cabelludo tiene una red de capilares que suministran oxígeno y nutrientes esenciales a todas las células de nuestro cuerpo. El estrés es una reacción que provoca la constricción de los capilares, lo que a su vez reduce la cantidad de oxígeno y sustancias suministradas a las células de nuestro cuerpo, incluidos los folículos pilosos, provocando su debilitamiento.

¿Cómo combatir la calvicie?

No obstante, existen muchos métodos que puede utilizar para combatir la caída del cabello. Una sugerencia son los suplementos dietéticos, que son una ayuda temporal para mejorar la vascularización del cuero cabelludo y estimular la microcirculación. Los masajes regulares del cuero cabelludo, así como el uso de aceites (por ejemplo, de bardana) son otras formas de mejorar el estado del cabello. También debe prestarse atención a la dieta para que no sea deficitaria en micronutrientes como el zinc, las proteínas o el hierro.

Tratamientos en el salón de belleza

Los salones de belleza también acuden al rescate, ofreciendo, entre otras cosas, un tratamiento para inyectar en el cuero cabelludo mezclas de preparados de apoyo (mesoterapia).
Si el problema de alopecia es más grave, puede recurrirse a la intradermoterapia con plasma rico en plaquetas del propio paciente. Se trata de un procedimiento que estimula fuertemente y suministra factores de crecimiento a los folículos pilosos. El procedimiento consiste en inyectar en el cuero cabelludo un preparado obtenido de nuestra propia sangre.

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Foto de la calvicie : panthermedia

La carboxiterapia, o tratamiento con dióxido de carbono, es excelente para la caída del cabello, ya que las moléculas de dióxido de carbono, inyectadas por vía subcutánea, dilatan los vasos sanguíneos, mejorando el flujo de oxígeno y nutrientes esenciales a los folículos pilosos.

En los casos en los que el problema, además de la caída del cabello, es también la inflamación del cuero cabelludo, la solución es la terapia regenerativa con células (madre). Este tratamiento se realiza de una sola vez utilizando células madre, previamente preparadas, extraídas de la sangre del paciente. [3]